Ruta 6: Monte de Cardeñajimeno

Descubrir las sendas entre el robledal, "Quercus pyrenaica", de Cardeñajimeno,  tanto en bici como andando es una buena opción; se encuentra a menos de 2 km del camping. Luego, con la bici, nos damos un largo paseo - 34,7 km - por los páramos de Carcedo.
Esta es la dirección del camino para utilizarlo en un GPSCircular ciudad de Burgos 6

La ruta 6 sigue una trayectoria hacia el sur alejándose del río Arlanzón e internándose en los páramos terciarios limítrofes con las calizas del cretácico superior. En la fotografía aérea se aprecia el recinto del Monasterio y el bosque de Cardeñajimeno, entre otros lugares. En azul el río Arlanzón.
Mapa topográfico de la ruta 6
El monte de roble rebollo de Cardeñajimeno  crece sobre una terraza del río  Arlanzón, que en el mapa geológico aparece con el número 34, a una altitud de 940 m, mientras el río  discurre a 880 metros. Prácticamente toda la terraza está colonizada por el rebollo.

En los bordes cultivados del monte de Cardeñajimeno aparecen, en primer plano, los cantos cuarcíticos, típicos de las terrazas del Arlanzón, sobresaliendo entre la cebada que en este invierno cálido comienza a germinar.

Esta es la imagen aérea del bosque de roble rebollo de Cardeñajimeno, limitado por el trazo amarillo donde, comparándola con la imagen del mapa geológico anterior, se aprecia fácilmente la situación de la terraza. La zona más cercana al pueblo está adehesada. En las últimas décadas ha sufrido dos atentados que se perciben desde el cielo: el paso de la autovía de circunvalación de Burgos y la apertura de la zanja, en línea recta, para instalar el gas ciudad.

En rojo el recorrido propuesto en esta ruta, aunque uno se puede entretener en descubrir las innumerables sendas ocultas donde se refugia la fauna silvestre.
Sendas por las que discurre la ruta en el monte de Cardeñajimeno, cuando en verano cuando en invierno.
Hoja lobulada del roble rebollo que,aunque caducifolio, mantiene parte de su abrigo hasta el mes de marzo cuando lo pierde poco antes de vestirse de una nueva capa verde."Quercus pyrenaica", el nombre científico, pertenece al grupo de árboles englobados en el género "Quercus" y esta denominación proviene de la unión de dos palabras celtas; por un lado "Quer" (bello) y por otro "cuez" (árbol). Así pues, significa "árbol hermoso".
La fotografía de la hoja seca y ocre la tomé a primeros de febrero'13 un sábado que estaba nevando y cuando se abrió un claro en el cielo de la mañana, el sol la iluminaba justamente por el envés destacando sus nervios  como venas y ahí la capturé sin piedad. En casa he añadido la hoja verde para comparar.
Árboles que protegen sus yemas de los rigores invernales mediante esta técnica reciben el nombre de marcescentes, en clara referencia al mes de marzo.
Liquen del género Evernia, en forma de barba, sobre la corteza del rebollo coronado por unos copos de nieve. Los pelos de la barba con forma de cinta colonizan zonas sombreadas y húmedas, libres de contaminación.

Del pino albar, "Pinus sylvestris", ha caído sobre la alfombra del suelo la corteza rojiza,  escama casi transparente, de la parte superior del árbol color zanahoria, y que con solo mirar al suelo clasificamos esta especie.
El caracol principal de la imagen  de color blanco "Gyraulus sp", pertenece a la familia de los planórbidos, concha plana limitada por dos planos subparalelos,  que son propios de agua dulce de poca profundidad alimentándose de algas y plantas acuáticas  Le acompañan los géneros Melanopsis y Lymnaea (inferior derecha).

Talud al borde del camino donde se encuentran los fósiles gasterópodos del mioceno que aparecen en la imagen anterior.
Mirando hacia el este se aprecia la silueta de la Demanda y las Sierras de San Millán, a la izquierda, y la del Mencilla, a la derecha. Los picos señalados corresponden al San Millán, cima más alta de la provincia de Burgos con 2.131 metros, y al Mencilla,  éste más modesto con casi 2000.
En el monte de Carcedo aparece un nutrido grupo de quejigos, "Quercus faginea" y algunos de ellos muestran agallas en abundancia. Las agallas de los Quercus son las más frecuentes en la naturaleza, el 86% se encuentran en este género de árboles.